sábado, 11 de octubre de 2014

Sábado 4.

Cuando estoy en este estado de paranoia y en plan víctima tota, me dan ganas de abofetearme la cara.
El tiempo nublado, me pone de muy mala leche y acabo pagando toda esta frustración, anulando mi actividad física por completo.
Llevo todo el día de la cama al sofá, del sofá a la cama y ahora me tengo que ir a trabajar y no tengo ganas.

Supongo que los sábados están para hacer nada, pero es que me siento inútil no haciendo nada.
Tengo toda la habitación hecha un auténtico desastre, tengo que ducharme, maquillarme y vestirme y parecer una persona decente detrás del mostrador, ya que mi cara de sábado es un auténtico desastre.

No me apetece hacer nada, quiero estar tumbada en la cama, mirando el techo dejando las horas pasar y dejando de pensar en gilipolleces.

Me dan ataques de calor, eso me pone negra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario