domingo, 5 de junio de 2016

Resolución del trabajo+cumpleaños.

Finalmente no me dieron el trabajo.
Y ese no es el hecho que más me molestó, porque en esta vida estamos para arriesgar, y en el riesgo asumes tanto la victoria, como la derrota. No me arrepiento de haberme gastado una pasta en viajes, y haber vivido la experiencia.
Lo que si me fastidió bastante, fue el hecho de que después de haber pasado tres días mano a mano con el jefe de la empresa, este "individuo", no tuviera ni si quiera la poca educación, de antes de volver a casa decirme a la cara que no me daba el puesto. Me mandó de vuelta a mi casa, prometiendo una llamada durante la tarde para darme una respuesta.
Se esperó a que yo le mandase un whatsapp a las diez de la noche, desesperada porque todo parecía indicar que si, que el lunes empezaría. Contestándome que lo sentía mucho, pero que se quedaba con otra chica que también había ido durante la semana y que si no le iba bien con ella, que ya me llamaría a mí. 
Y como guinda del pastel, que me cuidase y que lo sentía mucho.

Después de todo no pasa nada, porque en el mismo día me llamaron para otra entrevista aquí dónde vivo, en mi casi-ciudad. 
Es lo mismo de siempre, sector hostelería, pero el sueldo es prácticamente el mismo que en el otro trabajo y si no me lo dan, no me va a doler tanto el bolsillo.
En estos momentos me siento muy conformista, pero también tengo que tener los pies plantados en la tierra. Llevo sólo 3-4 semanas echando currículums, y ya me han llamado de 5 sitios.
Es también para sentirse afortunada y privilegiada, más cuando pertenezco a una zona de Andalucía, dónde está la tasa de paro más alta.

Y llegamos a mi cumpleaños. Oficialmente ya tengo 23 primaveras, o veranos mejor dicho.
Hice una cenita para los amigos en casa y poco más. La verdad que a medida que voy cumpliendo años, le voy viendo menos gracia a celebrarlo. Tengo un poquito de trauma con lo de crecer y todo porque siento que la vida va demasiado deprisa para mí y estoy perdiendo mucho tiempo.
Igual puede parecer una exageración teniendo en cuenta mi juventud, pero desde que cumplí los 18, me parece que los años son menos largos, que los acontecimientos se acercan a una velocidad vertiginosa y que no estoy dando todo de mí para aprovechar bien el tiempo.

Hoy, que es domingo, me siento una procastinadora total. 
He planchado (que es de las pocas cosas de la casa que me gusta hacer), he re-visto una peli de mi juventud (Thirteen) y he puesto algo de orden en mi habitación.
Quiero hacer limpieza de armario, pero me voy a quedar con cuatro cosas porque la mayoría de mis prendas de ropa, están bastante usadas y desgastadas. Me apetece ir de compras, pero nada de lo que hay en las tiendas me inspira, todo me parece exactamente igual, muchas flores, muchos volantes y telas vaporosas. Y los zapatos-chanclas-sandalias ortopédicas, con la misma anchura de tacón en la parte frontal que en el talón. ¡Qué pereza!


2 comentarios:

  1. Joder, lo siento nena... Y vaya impresentable el jefe...Cómo odio los que no te dicen las cosas claras... Pero como tú bien dices, es una experiencia más y si sigues así, tarde o temprano te saldrá curro. Y felicidades, por cierto!!!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya se me ha ido pasando el enfado inicial, pero bueno, es lo que tiene exponerse. Que hay veces que no te sale como esperas.
      Muchas gracias bonita :)

      Eliminar